Toulouse es la ciudad de la luz. Estuvimos una semana de aquí para allá viendo toda la ciudad. Sus monumentos y sus parques son enormes con preciosas y floridas plantas de todo colorido.
La amabilidad de sus gentes tan agradables, como te atienden, con mucho cariño; sus restaurantes elegantes y bien cuidados; sus platos exquisitos muy bien preparados, que hacen las delicias del cliente, son tan cuidadosos y elegantes que dan ganas de quedarse allí.
Sus trasportes son limpios anchos y muy cómodos. Por ejemplo, el metro tenía unas cristaleras que separaban el andén del tren para proteger a las personas y evitar accidentes.
EL título de la ciudad de la luz lo tiene bien merecido. Sus edificios son de un colorido rosado. Sus mercadillos callejeros con productos de mucha calidad, tanto la comida como la ropa son de un estilo especial y el calzado y los muebles son de una auténtica belleza.
También estuvimos en Lourdes y lo pasamos muy bien, nunca he visto tantos peregrinos para pedirle a la virgen por sus seres queridos.
Mª LUZ MORENTE
Mayores con Ilusion 
Muy bien MariLuz, que bien lo has detallado todo el viaje, explicas cada rincón como si estuvieras en este momento viendo el paisaje, que buena memoria tienes, hurga en ella recordando nuevos viajes y nos cuentas, enhorabuena.
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HOLA CAMELIA MUCHÍSIMAS GRACIAS POR TU COMENTARIO ME ALEGRO QUE TE GUSTE HA VER SI LA PRO-SIMA PODEMOS PONER MUCHO MÁS UN BESO
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